“Puelo sin Torres” informó que recurrirán al Tribunal Ambiental de Valdivia “con el fin de develar las múltiples irregularidades y carencias que ha tenido tanto el proceso como el propio estudio de impacto ambiental”. “Nuestro objetivo final es que este proyecto no se materialice, su aprobación es solo una dificultad que sabremos sortear” señalaron desde la organización.
Luego de analizar en profundidad la información que liberó el ministerio del Medio Ambiente sobre la aprobación, el lunes 2 de noviembre, de la central Mediterráneo en la cuenca del río Puelo, los impulsores de la campaña “Puelo sin Torres” anunciaron las acciones legales que impulsarán para detener la iniciativa.
El presidente (s) de la Corporación Puelo Patagonia, Rodrigo Condeza, explicó que aunque la decisión del Comité de Ministros “es una bofetada al interés nacional de avanzar hacia un país que no sacrifique ecosistemas únicos y emprendimientos locales y sustentables para favorecer negocios privados dañinos al interés público y al patrimonio natural, tenemos claro que el objetivo final es que este nefasto no se materialice. Su aprobación ambiental es solo una dificultad que sabremos sortear”.
En este sentido, señaló que “la historia ambiental está plagada de iniciativas que tuvieron el apoyo de ciertas instituciones y autoridades, y que nunca se concretaron. Por ello trabajaremos para demostrar que este es un mal proyecto, innecesario y que afecta una de las zonas más valiosas del territorio nacional. Eso es lo que haremos como organizaciones ciudadanas”.
Al respecto la abogada Macarena Soler explicó que “llevaremos este caso a los tribunales ambientales con el fin de develar las múltiples irregularidades y carencias que ha tenido tanto el proceso como el propio estudio de impacto ambiental”. En estos momentos se están preparando las presentaciones a realizar ante el Tribunal Ambiental de Valdivia, para lo cual los ciudadanos y organizaciones cuyas reclamaciones no fueron consideradas tienen un plazo de 30 días.
En este sentido desde Puelo Patagonia calificaron de “irrisorias las condiciones que puso el Comité de Ministros, donde con respecto a las torres solicitan cambiar la forma pero sin hacerse cargo del impacto de los ecosistemas, por ejemplo, con la tala de bosque nativo”.
Las organizaciones preocupadas de la defensa de la cuenca del río Puelo señalaron que la aprobación de este proyecto es una prueba más de que el sistema de evaluación de impacto ambiental es, por decir lo menos, poco riguroso y que no busca la protección del medio ambiente y la naturaleza del país. “Es solo un trámite para aprobar inversiones con bajo nivel de exigencia y resguardo ambiental” puntualizaron.
Por último, recalcaron que seguirán “en la defensa de los territorios ante un modelo extractivista que arrasa con ecosistemas y comunidades, porque es un compromiso con el presente y el futuro, y en eso no claudicaremos juntos a los chilenos y chilenas conscientes”.