Chawrakawin, Osorno, Viernes 29 de noviembre de 2019.-
A continuación, compartimos el comunicado Público emitido por las Autoridades tradicionales Mapuche Williche, Organizaciones, Asociaciones y Comunidades Mapuche Williche, Fütawillimapu.
1. El Pueblo Nación Mapuche en la Fütawillimapu, así como los territorios de Ngulumapu, Pikunmapu y el Puelmapu, han desarrollado históricamente un proyecto político centrado en la defensa, promoción, resguardo y proyección de la vida de todos los seres humanos y no humanos que habitan en nuestro territorio. Nos hemos autoregulado desde tiempos inmemoriales por el Yamuwün que forma parte esencial del Azmapu y en ellos están dispuestas las normas, leyes y códigos de coexistencia entre Che (persona) e Itrofillmogen (o diversidad de vida). Es necesario señalar que la lucha y resistencia mapuche, ha sido responsable y respetuosa de la vida humana, sustentada en los profundos valores humanos que se desprenden del vínculo y complemento de los che con la ñuke mapu. Esto se ha expresado en una lucha milenaria, primero frente la política de muerte y despojo del colonialismo hispano, luego frente a los colonialismos republicanos chileno-argentino y actualmente frente al nuevo ciclo de colonización trasnacional que mediante proyectos extractivos (mineras, hidroeléctricas, industria acuícola, forestal y turismo a gran escala) violenta nuestros territorios y donde los estados operan como bisagras a través de su aparato represivo, judicial o mediante políticas multiculturales neoliberales que sólo nos han entregado migajas.
2. Denunciamos que actualmente somos objeto de una campaña y propaganda del terror, mediante discursos que nos representan como “terroristas”, “violentistas” y montajes que incluyen panfletos donde se nos presenta como “violadores”. Las bestias opresoras purgan sus actos en los cuerpos oprimidos, haciéndonos ver como “indios sin alma”. El uso de las distintas formas de violencia a estado concentrada en manos de los opresores, así lo hemos podido constatar en carne propia, sólo por citar dos ejemplos:
– La violación sexual ha sido precisamente una de las armas de los colonizadores sobre los cuerpos de mujeres indígenas y campesinas, lo cual se ha practicado en los campos bajo el derecho de pernada en los siglos XIX y XX.
– El estado chileno ha sido responsable del asesinato de un largo listado de comuneros mapuche, crímenes que han quedado en completa impunidad. Asimismo, clarificamos que durante período de lucha y resistencia mapuche, no hemos sido responsable de ningún asesinato planificado.
Esta propaganda de terror reinstala estereotipos racistas y coloniales de vieja data como “indios” “salvajes”, “bárbaros” o seres infrahumanos, y está siendo impulsada por sujetos racistas y supremacistas de ultraderecha y representantes de multigremiales agrícolas. Su objetivo político es crear un clima que legitime y facilite las condiciones para justificar la violencia paramilitar y el terrorismo de estado en la Fütawillimapu; generar desconfianza y fracturar las redes de solidaridad y alianza que se están gestando entre la sociedad popular chilena y el pueblo mapuche en el actual contexto de crisis social y política en Chile.
3. Desmitificamos la tesis de “la existencia de tierras vacías de grupos humanos en la Fütawillimapu” (actuales regiones de Los Ríos y Los Lagos) durante la colonización alemana, 1850-1910. Esta tesis es propia de la doctrina de Terra Nullius o tierras vacías, que en otros contextos (Canadá, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Argentina, Patagonia y Tierra del Fuego) también han promovido los regímenes coloniales para justificar el despojo de los pueblos indígenas y colonizados, para apropiarse de sus tierras por parte de elites coloniales suplantadoras. Que se escuche fuerte y claro: los mapuche de la Fütawillimapu hemos sido objeto de un proceso de colonización y genocidio a partir de la dictación de la Ley de Colonización promulgada en 1845, lo que permitió el ensamblaje del capitalismo, el racismo estructural y el patriarcado en la estructura regional. Este genocidio no sólo se materializó a través de matanzas, asesinatos selectivos de líderes y lideresas mapuche-williche, sino también mediante secuestros de niños y niñas, castigos, violencia física y mental sistemática. Lo cual ha estado acompañado del despojo territorial, el empobrecimiento y la desarticulación de un sentido de totalidad política, cultural y social de nuestro pueblo. El genocidio histórico en la Fütawillimapu constituye un crimen de lesa humanidad cuya sanción y reparación es un asunto pendiente. Sin embargo, las pruebas que permiten sostener este argumento se encuentran tanto en la propia memoria colectiva de nuestras familias, como en fuentes documentales oficiales.
4. Las condiciones que permitirán que la vida de todos y todas florezca en la Fütawillimapu, necesitan que asumamos que los problemas históricos y actuales en estos territorios requieren de un profundo debate y solución política con altura de miras. El principio básico para ello es la recuperación del legítimo derecho a la a la Libre Determinación del pueblo mapuche y del pueblo chileno. Para recuperar este derecho que nos ha sido conculcado y arrebatado, debemos avanzar en alianzas, articulaciones y entretejernos políticamente. Sólo así podremos sobrepasar la política de muerte a la que hemos estado históricamente sometidos. Sólo así la vida volverá a florecer en la Fütawillimapu.
¡¡¡JUSTICIA, TERRITORIO Y LIBRE DETERMINACIÓN PARA LOS PUEBLOS!!!
Los firmantes:
Autoridades tradicionales Mapuche Williche,
Organizaciones, Asociaciones y Comunidades Mapuche Williche
Pueblo Nación Mapuche en la Fütawillimapu